El valor añadido por Kurt Schleicher, a 19 de Julio 2012
Nos
recuerda al IVA, pero no me refiero al impuesto, sino a una mala traducción de
eso que llamábamos “added value” en inglés y que traducido en vivo y en directo
significa eso, valor añadido.
Y en medio de la situación angustiosa que
vivimos en derredor nuestro (todo el mundo empezando a perder los papeles,
empezando por el acosado gobierno clamando que debe elegir entre la fea y la
más fea, que no tiene un duro y
amenazando con que a la siguiente ya se va a meter con las nóminas y no se va a
conformar con eliminar la paga extra, con la oposición metiendo el dedo en el
ojo morado y la gente protestando –como tiene su lógica si te pisan un callo, que
lo menos que haces es chillar sin pensarlo más), pues estamos dando un espectáculo
demasiado griego. Y lo malo es que el fuerte de los griegos no eran las comedias
fáciles, sino las tragedias. Y si pensamos en otras acepciones de “griego” como
sustantivo, pues no sería algo lejano a la realidad próxima, si la curva no
cambia pronto la pendiente.
Lo malo es que el gobierno no lo tiene fácil,
pues está también amordazado al menos en las formas: el mensaje subliminal al
público o a la UE a lo mejor debe ser el contrario al que deben dar a los
mercados, y así la comunicación se hace compleja.
Y si se pierden los papeles, el primer efecto
es el descenso brusco de la credibilidad del que los pierde; flaco favor está
haciendo la oposición con la imagen de desunión que provoca.- Llega esto al
contrasentido de tener que pensar “menos
mal que el gobierno tiene la mayoría absoluta, pues en caso contrario, menuda
la que se estaría formando”. Lo de Grecia sería una anécdota menor
comparado con lo que pasaría aquí.
Volviendo al valor añadido, me pregunto cuál
es el VA de los feroces ataques al gobierno, con insultos incluidos (de “chulo”
para arriba) y su ejemplaridad y generación de credibilidad.- El desgaste del
gobierno ante estas situaciones puede llegar a ser peligroso, pues al fin y a
la postre son seres humanos e imperfectos. Y a los mercados no se les escapa
eso; cuando huele a desesperación, se ensaña aún más. Igual que los perros
cuando huelen el miedo. Jodidillo.
Me pregunto cuál es el valor añadido de los representantes
sindicales, que también se aprovechan de la situación, haciendo lo único que
saben hacer: azuzar, malutilizando los sentimientos del gran público, que sufre
con los recortes, uno tras otro. ¿Están acaso por encima del bien y del mal?
Pues parece que tampoco, si se considera que controlan como empresarios a más
de 100 sociedades con 5200 empleados (La Gaceta, Feb. 2012).- Menos mal que
alguien ha empezado por proponer recortar a los liberados sindicales.- No me
extraña que esta noche se hayan metido los propios manifestantes con el amigo
Cándido, que estaba tomándose tranquilamente unas cervezas en la plaza de
Isabel II en pleno follón.
Me pregunto por al valor añadido de las
autonomías; no me refiero a que desaparezcan (¡?), pero que se racionalicen al
menos sus cometidos. Como muestra vale un botón: embajadas de las autonomías españolas
en la mayoría de los países del mundo.- ¿Y quién las paga? Pues los mismos de
siempre. Y la imagen, ridícula.- No me extraña que se metan por ahí fuera con
las susodichas y se pierda credibilidad a esgalla.
Asimismo me pregunto por el valor añadido de
muchas subvenciones, que aún colean, al parecer. Algunas tendrán su razón de
ser, pero, ¿se han analizado bien? (Alguna
decrépita institución por lo menos ha hecho algún esfuerzo de VA (el rey en
Rusia apoyando al AVE), que no sé si será suficiente para recuperar la imagen perdida,
pero en fin, algo ha hecho, aunque tenga un valor relativo si se consideran las
comisiones que seguramente se lleva, pero como ejemplo positivo de VA, me sirve).
Me pregunto qué se hace en la empresa
privada con aquello que tenga poco, nada o hasta VA negativo.- Bueno, la
respuesta ya la sé, es obvia. Y los mercados miran desde la óptica de la
empresa privada…
Y es que aún queda mucho por hacer en cuanto
a análisis de VA en este país y cancha para que el gobierno haga algo más que
lo que ha hecho hasta ahora en este terreno.
Y no es sólo el valor añadido; los que mandan
(= gobierno) lo deben hacer bien, y ahora me meto también con ellos: deben
saber dar ejemplo y de forma inteligente. Pero ni lo uno ni lo otro; el ejemplo
lo dan a diócesis pequeñas, matando el efecto que podrían conseguir. Con decir
que se bajan el 7% (y no todos) consiguen irritar más que otra cosa, por lo del
agravio comparativo frente a otros que ya sufren varias diócesis de ésas en sus
carnes. Y diciendo “no puedo, no puedo, no tengo nada…” solamente consiguen
bajar nuestra credibilidad a los que nos vigilan. Les falta mucho “punch”
todavía, pese a todo… y no convencen ni a unos ni a otros; deciden sólo aquello
que no tienen más remedio que hacer, pero me irrita su falta de puntería,
tirando solamente a los blancos fáciles, y su falta de imaginación (por no
sacar de la chistera otras fuentes de financiación, que haberlas haylas, en
caso extremo tirando hasta del patrimonio nacional).
Y pese a todo eso, hoy el Bundestag ha votado
por inmensa mayoría a favor de que nos den (bueno, a los bancos) los cien mil
millones, de los que 30000 tienen sabor a bolsillo de alemanes. Y que todos o casi
todos han vuelto de sus vacaciones para avalar el préstamo, de buena o mala
gana. No es mal ejemplo, pues dar 30000 millones también duele. Y menos mal…
Las palabras mágicas son, pues:
-
Credibilidad
-
Ejemplaridad
-
Comunicación
-
Valor
añadido
O se sacan estas banderas y se ondean bien
visiblemente, o la curva seguirá para abajo…
El Gobierno lo tiene difícil en lo de credibilidad, confianza, comunicación y ejemplaridad.
ResponderEliminarLo sostiene un partido que no ha cambiado el chip de estos últimos 8 años: la herencia, Zapatero..., a pesar de tener mayoría absoluta le preocupa más la oposición que la gobernanza. Cuando se hace todo lo contrario de lo que dijo en la campaña electoral, ha corrompido la democracia, se ha deslegitimado y ha legitimado las protestas ciudadanas. Antes que la Oposición y los Sindicatos, es el Gobierno el que debe convocar (creo que ya es tarde)unos nuevos Pactos de la Moncloa o algo parecido, sino no queda otra que nuevas elecciones.
Sí, lo tiene difícil... no quiero entrar en valoraciones políticas, pero hay ocasiones en que hay que saber elegir lo menos malo y entiendo que nadar contra corriente no es fácil y suele pasar que al final se va para atrás y no se avanza. No creo que sea cómodo tomar decisiones a sabiendas de que no van a gustar y encima se van a perder votos; no me importa si se ha ido en contra de lo que se ha dicho, cosa que a alguien le va a costar caro. El problema de fondo es que lo que importa ni se ha resuelto ni tiene visos de resolverse y lo que se debe requerir a un gobierno es responsabilidad y capacidad de dar y encontrar las soluciones apropiadas. No vale equivocarse; le pagan (le pagamos) para que no lo haga.-
ResponderEliminarEl gobierno tiene que gobernar en todos los sentidos y PARA TODOS y desgraciadamente hasta ahora lo que está demostrando, aparte de su engaño durante la campaña electoral, (el que no conocieran la situación de nuestra economía no se lo creen ni ellos, dentro de una Europa gobernada por la derecha económica), estan gobernando de forma zafia e injusta, destrozando los servicios públicos mas importantes, destrozando la política de investigación, destrozando la política informativa (nunca habíamos tenido una RTVE y RNE mas plural y limpia y ya han comenzado a cargarsela ¿Como pueden llevar a TVE al que manejaba la tertulia de INtereconomía? o colocar a Ignacio "nosequé" (calvo) incendiario e "insultador impenitente de todo lo que no fuera la rancia derecha" como director de TV Castilla La mancha?.
ResponderEliminarEsttán actuando con prepotencia y "por que pueden y para que "se jodan" y se sienten orgullosos de mostrarlo.
Totalmente de acuerdo con los pactos de estado, como los de La Moncloa, pero parece que no estamos por la labor, e incluyo a los otros. Pero una cosa si es cierta, se han puesto en contra a todos incluso a la CEOE.
Personalmente un cambio de ciclo o de partido cada X legislaturas es sano y limpio, pero no se puede hacer así, parece, por ahora.
Me queda la esperanza que con ese pacto se podría conseguir ese VA en los puntos que has mencionado, autonomías, liberados, elefantes monárquicos, etc.
A lo mejor es lo que hay que pedir en las manifestaciones o a través de Europa. Obligar a un pacto de estado
SE me olvidó: No han tocado nada que signifique un ligero roze con el capital establecido, fortunas, iglesia, etc.
ResponderEliminar¡Joder!, al menos un detalle, si ya sabemos que no va a ser nada porque no tienen nada (se lo han llevado todo), pero al menos "paaayo, un detalle"